Y uno no sabe si ponerse contento o ponerse triste, si festejarlo abiertamente o llevar la pena en la más profunda soledad.
Bueno, creo que no es para tanto, pero luego de dos semanas en las que hubo que arreglárselas para entretener a dos niñas llenas de energía y vigor ustedes sabrán entender. Uno como padre se "acostumbra" a esto de tener que preocuparse de las tareas de la escuela, de que el uniforme esté limpio, de cumplir con las excentricidades que las maestras piden de un día para el otro, etc. etc. Y de golpe...¡ZAS! todo eso se desmorona.
Ahora eres tu y ella.
Tu, dispuesto a seguir con la rutina a la que tan bien te habías adaptado. Ella, dispuesta a que entres en razón lo más rápido posible que ahora serás el responsable de su tiempo ¡las 24 horas del día! Y ya se podrán imaginar quién fue la que ganó, ¿no?
El úlitmo día de vacaciones nos fuimos al Paseo del Sol. Un shopping que tiene bastantes cosas para ver y hacer. Así que las niñas estuvieron de lo más entretenidas en los juegos electrónicos, mirando espectáculos y comiéndose una hamburguesa. Era el último día de una batalla que ya estaba perdida.
Bueno, creo que no es para tanto, pero luego de dos semanas en las que hubo que arreglárselas para entretener a dos niñas llenas de energía y vigor ustedes sabrán entender. Uno como padre se "acostumbra" a esto de tener que preocuparse de las tareas de la escuela, de que el uniforme esté limpio, de cumplir con las excentricidades que las maestras piden de un día para el otro, etc. etc. Y de golpe...¡ZAS! todo eso se desmorona.
Ahora eres tu y ella.
Tu, dispuesto a seguir con la rutina a la que tan bien te habías adaptado. Ella, dispuesta a que entres en razón lo más rápido posible que ahora serás el responsable de su tiempo ¡las 24 horas del día! Y ya se podrán imaginar quién fue la que ganó, ¿no?
El úlitmo día de vacaciones nos fuimos al Paseo del Sol. Un shopping que tiene bastantes cosas para ver y hacer. Así que las niñas estuvieron de lo más entretenidas en los juegos electrónicos, mirando espectáculos y comiéndose una hamburguesa. Era el último día de una batalla que ya estaba perdida.